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- En el minuto 19, un pase de Berenguer dejó a Iñaki en un mano a mano con el portero Valles, pero su disparo fue parado.
El Athletic sigue en su buena racha. Después de vencer al Sevilla y al Rayo Vallecano en San Mamés, los leones lograron su tercera victoria consecutiva en el inicio de la liga al superar 1-2 al Betis en La Cartuja. La victoria fue impulsada por dos goles: un autogol de Marc Bartra y un espléndido tanto de Aitor Paredes. Ernesto Valverde afrontó el partido sin un delantero centro natural en el once inicial, dejando en el banquillo a Maroan, Guruzeta e Izeta. En su lugar, Berenguer ocupó la posición de referencia ofensiva.
A los 14 minutos, Berenguer intercambió su puesto con Iñaki Williams, quien todavía no ha alcanzado su mejor nivel. Durante la primera mitad, Iñaki, que es convocado con Ghana para la fase de clasificación del Mundial 2026 contra Chad y Mali, no logró encontrar su lugar en el juego. Aunque se destacó en la presión sin balón, fue errático frente a la portería. En varias ocasiones, incluidas una jugada donde controló perfectamente un pase de su hermano Nico, no estuvo acertado en sus remates.
En el minuto 19, un pase de Berenguer dejó a Iñaki en un mano a mano con el portero Valles, pero su disparo fue parado. Más tarde, casi al final de la primera mitad, tuvo otra oportunidad en un intento de controlar un envío de Nico que se le fue largo, dejándole sin opción de disparar.
Aunque Iñaki no tuvo más ocasiones claras de gol, mejoró un poco en la segunda mitad cuando regresó a la banda derecha. Sin embargo, en el minuto 75, fue sustituido por Maroan.
GURUZETA, SIN OPORTUNIDADES
Guruzeta se quedó en el banquillo durante el encuentro, marcando su primera ausencia de minutos esta temporada. Tras haber sido un revulsivo en los dos primeros partidos, donde tuvo 24 y 12 minutos de participación, hoy se encuentra detrás de Maroan en las preferencias de Valverde en el ataque. Iñaki y Berenguer, como piezas versátiles, dejaron a ambos delanteros fuera de la alineación titular en La Cartuja, donde fueron dos defensores los encargados de marcar los goles para el equipo.