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- Este arranque poco alentador ha generado dudas sobre la eficacia de un equipo que parece incapaz de superar a sus rivales, ubicados en la parte media o baja de la tabla.
El Atlético atraviesa un momento complicado. Tras sus empates recientes contra Espanyol y Elche, se encuentra en una situación delicada, sumando sólo dos puntos de los últimos nueve disputados. Este arranque poco alentador ha generado dudas sobre la eficacia de un equipo que parece incapaz de superar a sus rivales, ubicados en la parte media o baja de la tabla. Con un balace de cuatro goles en contra y tres a favor, el desastre es evidente.
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Antonio Sivera, Jonny, Moussa Diarra (Ander Guevara, min. 57), Facundo Garcés, Nahuel Tenaglia, Carles Aleñá, Antonio Blanco, Carlos Vicente, Pablo Ibáñez (Carlos Protesoni, min. 78), Toni Martínez (Mariano Díaz, min. 79) y Jon Guridi (Victor Parada, min. 56)
1
Jan Oblak, Clément Lenglet, Marcos Llorente, Robin Le Normand, Dávid Hancko (Conor Gallagher, min. 71), Thiago Almada (Antoine Griezmann, min. 72), Giuliano Simeone (Koke, min. 87), Johnny Cardoso (Matteo Ruggeri, min. 71), Pablo Barrios, Alexander Sørloth y Julián Alvarez (Giacomo Raspadori, min. 87)
Goles 0-1 min. 6: Giuliano Simeone. 1-1 min. 13: Carlos Vicente
Árbitro: Victor García Verdura
Tarjetas amarillas Johnny (min. 28), Moussa Diarra (min. 37), Sörloth (min. 41), Victor Parada (min. 83), Koke (min. 93)
La falta de claridad brindada en el ataque se refleja en el desempeño de su delantero estrella, Julián Alvarez. Más que solo una crisis de goles, parece tener un conflicto con el juego mismo. Bajar al medio campo buscando el balón limpio solo le trae frustraciones, y su intento de organizar el ataque resulta fallido. Simeone optó por sustituirlo al final, manteniendo a Sorloth en el campo, pero la misión contra un Alavés contrario no pudo concretarse.
El Atlético abrió el marcador temprano, lo que acostumbraba a significar una ventaja. Giuliano Simeone, tras pelear con los defensas, ejecutó un disparo bajo, su acción logró el primer tanto. Este fue un momento prometedor para un jugador que busca reafirmar su rendimiento tras la última temporada. Sin embargo, esta ventaja duró poco.
Poco después, la fragilidad defensiva se hizo evidente tras una falta de Marcos Llorente que generó un caos en la zaga. El Alavés se aprovechó de esta confusión, culminando con un gol de Carlos Vicente que dejó a Oblak sin opción de reacción.
Este empate dejó a los colchoneros en un estado de incertidumbre. El Alavés comenzó a sentirse cómodo en el partido, lo que dejó al Atlético luchando por mantener el control del juego. La conexión entre los mediocentros, Antonio Blanco y Pablo Barrios, no lograba funcionar bien, lo que complicaba cualquier intento de impulso. Por si fuera poco, la actitud de Almada se tornaba cada vez más errática, afectando el flujo del juego.
A medida que el encuentro avanzaba, las interrupciones se volvían una constante. Una atención necesaria para un aficionado interrumpió el ritmo del partido. Después de este parón, el Atlético pareció ofrecer una ligera reacción con la entrada de Griezmann y Gallagher. Crearon tres ocasiones, pero se encontraron con un Sivera extraordinariamente atento, impidiendo que cualquier intento terminara en gol.
A pesar de tener la iniciativa en el campo, el Atlético no lograba descifrar la defensa del Alavés. Cada vez que parecían encontrar una vía, el último pase fallaba o el tiro se quedaba corto. Realmente, esto es un indicativo preocupante para un equipo que no encuentra el rumbo en este inicio de temporada.
