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- “Vivo cerca de ese lugar y mi abuela me contaba historias similares”, “Tiene aspecto de volcán”, “Tuve un encuentro incómodo con un extranjero que llevaba un saco y una pala”, son algunas de las reflexiones de quienes han estado cerca.
Los residentes afirman que existe una fuerza misteriosa que protege la montaña conocida como Cerro Brujo, infligiendo castigos a aquellos que se atreven a perturbarla.
Situado entre la colonia El Sitio y Estados Unidos, este cerro impone un profundo respeto y guarda silencio tras el ocaso. Su historia está llena de leyendas y advertencias que se han transmitido por décadas.
Hace más de 30 años, un grupo de trabajadores emprendió la tarea de construir una carretera en la cima del cerro. Sin embargo, el proyecto fue abortado. Un obrero de maquinaria reportó haber visto una figura gigantesca moviéndose entre los árboles. En un momento aterrador, la entidad elevó su tractor y lo arrojó por un barranco con facilidad. El hombre sobrevivió, aunque quedó traumatizado y desquiciado. Desde entonces, el cerro no ha sido tocado de nuevo.
Los lugareños consideran este suceso como la primera señal de que una poderosa fuerza resguarda el lugar.
Con el tiempo, comenzaron a suceder fenómenos extraños. Algunos narran haber visto orbes de fuego deslizándose por la ladera, mientras que otros oyeron cánticos y el repiqueteo de tambores que resonaban en la noche entre los pinos.
La Silueta del Cerro Brujo
En Noches Claras, algunos aseguran haber avistado la silueta de un gigante en la cumbre, una sombra formidable que aparece durante breves instantes antes de desvanecerse.
“Es el espíritu del brujo”, susurran los ancianos. “Vigila a quienes se atreven a desafiarlo”.
La leyenda ha crecido con el tiempo. Se dice que en el núcleo del cerro hay una cueva enigmática que solo se abre a la medianoche. De su interior emana un fuerte olor a azufre, además de un viento gélido que puede extinguir cualquier llama.
Nadie ha logrado confirmar qué se halla en su interior, ya que pocos tienen el valor de aventurarse cuando cae la noche.
¿Es Real?
Cerro Brujo, desde sus alturas, mantiene un silencio casi palpable entre la bruma, como si estuviera al tanto de todo lo que acontece a sus pies. Algunos lo miran con curiosidad, otros con admiración.
“Vivo cerca de ese lugar y mi abuela me contaba historias similares”, “Tiene aspecto de volcán”, “Tuve un encuentro incómodo con un extranjero que llevaba un saco y una pala”, son algunas de las reflexiones de quienes han estado cerca.
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