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- La primera mitad se vio empañada por un tiro de José Luis Morales que fue detenido por la mano de Alejandro Balde, lo que llevó al árbitro Hernández Hernández a señalar la pena máxima tras consultar el VAR.
El FC Barcelona logró una notable remontada contra el Levante en un partido que estuvo marcado por un penalti polèmico. La primera mitad se vio empañada por un tiro de José Luis Morales que fue detenido por la mano de Alejandro Balde, lo que llevó al árbitro Hernández Hernández a señalar la pena máxima tras consultar el VAR. A pesar de las protestas de los culés, las reglas son claras: si la mano desvia un tiro y aumenta el tamaño del cuerpo, se considera penalti.
Las imágenes del VAR revelan cómo el árbitro canario tuvo una posición clara desde el inicio. Figueroa Vázquez, desde la sala VOR de Las Rozas, le aconsejó revisar la jugada: “Alejandro, te recomiendo que veas un posible penalti por manos”, marcando el contacto claro entre el balón y el brazo de Balde.
En el momento de la revisión, Hernández Hernández fue directo: “Vale, está bastante separada, sí, correcto”. El árbitro analizó la jugada con una cámara lenta y confirmó su decisión: “Saca el brazo. Perfecto. Número 3, penalti, sin tarjeta”. Este tipo de decisiones generan siempre controversia entre los aficionados.
🗣 AUDIO REVISIÓN VAR
🗓 Jornada 2 | Primera División
⚽ @LevanteUD 🆚 @FCBarcelona_es | 45’ + 3’ #ArbitrajeRFEF | @CTARFEF pic.twitter.com/qtHBf7t5LE
— RFEF (@rfef) August 23, 2025
Con el penalti a favor del Levante, Morales no falló, sentenciando el 2-0 justo antes del descanso. Este resultado dejaba al Barcelona en una situación complicada, pero en la segunda mitad, el equipo reaccionó con goles de Pedri y Ferran, además de un autogol que selló la victoria para los culés.
Al comparar esta situación con el penalti no señalado a Tchouaméni en un clásico anterior, se nota una clara diferencia. Tchouaméni recibió el disparo en una posición natural, sin tiempo de reacción. En contraste, Balde actúa intencionadamente con el brazo en L, impidiendo un tiro directo a puerta, algo que, según el Comité Técnico de Árbitros, justificó la pena máxima en su contra. Así, el debate sobre las decisiones arbitrales en el fútbol sigue en el aire.
